Es una pregunta
pretenciosa
y vana tal vez
porque ese sustantivo
encierra
tanta historia y
tanta tinta
que
atreverme a una
asunción
puede ser una
osadía
y una quimera.
Poetas pueden ser
los que dan
nombre a las calles
y los que están
en Wikipedia,
aquéllos que convocan
a los eruditos
de la Academia
que fundan movimientos
y al final
en un libro de texto
se encierran.
Yo sólo soy un
rasga letras
un bailarín
que se junta
con los versos
y los pasea
como un cuidador
que los saca a orinar
aunque no los posea.
No pretendo
dictar cátedra
o sentar presencia
sólo brotar de mí
como un erial
palabras silvestres
dientes de león
que vuelen
estrofas que se
muevan al viento
y flores que nadie
cultiva
o siembra.
Juzgue usted
al final
si el epíteto
me queda
No hay comentarios:
Publicar un comentario